miércoles, 18 de agosto de 2010

Un día de sol

Hace sol, un día precioso de primavera. Es maravilloso estar tumbado al sol, sintiendo como sus rayos te calientan. Te invade una dulce pereza, con los ojos cerrados, pero al mismo tiempo sientes que te estás recargando, que tu energía aumenta, en cualquier momento puedes ponerte en marcha con fuerzas renovadas. Es maravilloso también sentir, con los ojos cerrados cómo el sol te rodea, cae sobre ti y sobre el resto del mundo, puedes imaginar los movimientos de las hojas de los árboles agradecidas, oyes el zumbido de los insectos que revolotean por la vecindad, y...

Espera un momento... ¿pero, qué es esto? Un ruido molesto, algo que se corre por aquí cerca, unos pies diminutos que vienen a perturbar la tranquilidad de mi momento. Es apenas un roce, pero ha roto el equilibrio. Es... un ratón!!!

Quieto, tranquilo, tú sin moverte, sigue con tus ojos cerrados, que parezca que sigues dormitando al sol. ¡Se acerca, no, se va por otro lado... espera, da la la vuelta! ¡Se acerca más, y más, y más...!
Quieto, tú quieto, muyyyy quieto. Está muy cerca ya, no te ha visto, no te ha sentido moverte, no te ha olido...

¡¡Ahora!!

Mis mandíbulas se cierran sobre este bocado delicioso. Me relamo los bigotes de gusto. Verdaderamente es maravilloso ser un gato.

3 comentarios:

  1. ¡Iiiiiiiiiiiiiiiii! ¡Qué dolor! ¿Qué es lo que me pasa? ¿Donde estoy? Apenas veo un recuadro diminuto de luz entre... ¿colmillos? ¡horror! me han cazado! ¡como duele! mmmmmmmmm espero que este suplicio acabe pronto, he sido muy descuidado...tenía que haber supuesto que el maldito gato andaría por aqui.... aggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggggg

    ResponderEliminar
  2. Ayyyy, lo siento, no sabía que eras tú, espera, ahora toso y sales!!!!

    cof, cof, cof!!

    Ya está, ¡¡perdona!!

    ResponderEliminar